Los detectores de metales Serie L para tuberías de METTLER TOLEDO SAFELINE están diseñados predominantemente para su uso en la industria alimentaria. Estos sistemas de detección compactos y resistentes son adecuados para la inspección de todos los líquidos, pastas y salsas, y pueden detectar todos los tipos de contaminación con metales. Los cabezales detectores de la Serie L están diseñados para funcionar con inigualable sensibilidad a todos los tipos de metales, incluyendo los materiales ferrosos y no ferrosos y los aceros inoxidables. Esta superior capacidad de detección en combinación con la robusta estabilidad en entornos hostiles proporciona el mayor rendimiento en línea del mercado. Los sistemas de detección de metales en tuberías utilizan la tecnología ZMFZ exclusiva de SAFELINE para garantizar la longitud global mínima de la tubería, reduciendo así las posibilidades de que ocurra el llamado efecto creaming y permitiendo su inserción en líneas nuevas o en líneas ya en uso donde haya un espacio limitado.

Diseñados para facilitar su integración en líneas de producción de alimentos, los detectores de metales Signature Touch ofrecen alto rendimiento en detección de metales en la línea. Cuando se combinan con sistemas de manejo de materiales como transportadores, la inspección de productos puede automatizarse completamente. Se obtienen niveles superiores de sensibilidad de detección a través de las sofisticadas pero fáciles de usar plataformas electrónicas de Signature Touch. Éstas pueden detectar fácilmente incluso los aceros inoxidables no magnéticos y contaminantes de alambre finos no esféricos más difíciles de detectar. Con un rango probado de características, los detectores de metales Signature Touch respaldan su negocio al proporcionar una plataforma sólida desde la cual usted puede ofrecer altos niveles de detección de metales. El detector de metales Signature, una máquina estable y sensible, fácil de operar, de darle mantenimiento y de integrar en su línea de producción de alimentos, reduce los costos operativos, incrementa la productividad y mejora la competitividad.